El punto de partida es la infancia.
Confieso que fui una niña plenamente feliz. Disfrutaba pedaleando en mi bici y caminando por medio de los bosques durante mi infancia. Ahora comprendo el sentido que el movimiento y la naturaleza ya tenían para mí desde pequeñita.
En aquella época mis padres fueron mi ejemplo a seguir y mi pilar fundamental. Les debo tanto… Precisamente fueron ellos quienes me regalaron mi primera cámara de fotitos a los 7 añitos.
Este regalo supuso un antes y un después en mi forma de ver el mundo y expresar la vida. La fotografía me trajo ilusión y, por qué no decirlo, me sentía especial porque era peculiar que una niña tuviera una cámara donde yo vivía.
Fui creciendo y dando forma a mi mundo de adulto a mi manera. Perseguí la felicidad que tuve desde pequeña y pasaba horas y horas dedicada a mi familia y a dejar mi casa bonita. Cuidaba el jardín y a mis animalitos. Ellos, las plantas y las flores eran mucho más que una compañía para mí. Eran mi familia y formaban parte de mi hogar.
Vivía en un reloj de arena fina. Siempre corriendo de aquí para allá. Hasta que algo me paró en seco y me dijo: Isa, es el momento de frenar.
El punto de inflexión es una enfermedad.
¿Alguna vez has sentido que una tempestad remueve tu vida y la deja tan desordenada que tienes que unir los pedacitos uno a uno para comenzar de nuevo?
Un día me dieron la noticia: Isa, tienes una enfermedad que no tiene cura, a día de hoy solo existen medicamentos para internar frenarla.
Una nueva forma de vivir estaba asomando. Al principio no asumía que los dolores que sentía serían para siempre; pensaba que eran temporales y que desaparecerían. Me negaba a aceptar la realidad porque prefería volver atrás. Sufro días de dolor, llanto e insomnio. Durante esos momentos quiero desaparecer porque se que nada volverá a ser como antes y yo solo quiero relajarme en el pasado.
Sin embargo, los meses transcurrían y el sufrimiento seguía ahí, no querían alejarse de mí. Fue una época dolorosa, frustrante y triste. Puedes deducir que no fue fácil, al contrario, fue bastante difícil. Como dice la canción: Mi mundo era otro.
No me quedó más remedio que aceptar la enfermedad como mi nueva compañera de viaje en la montaña rusa de emociones en la que subo y bajo desde entonces. Sí, tuve que conocerme de nuevo.
El punto y aparte es una nueva oportunidad.
Un día entiendes que la enfermedad es vida y libertad. Sí, como lo lees. Aunque parezca contradictorio, la imperfección de mi salud es el combustible con el cual he descubierto el significado de vivir con libertad y la libertad de vivir.
Gracias a mi enfermedad he aprendido a valorar cada instante como un regalo. Cuando asimilé la dura realidad, opté por vivir con plenitud. Menos mal que mi cabecita positiva tomó las riendas. Y es que muchas veces se nos olvida que estamos aquí de paso y que hay que canjear el billete de ida y exprimir la visita.
Así fue como pasé de no ser capaz de vestirme sola, a recuperar esa vida normal que perdí de forma transitoria. Cuando ves la realidad, solo tienes dos opciones: o luchas o te rindes. A mí me gusta más luchar, también me gusta quererme.
Antes vivía por y para los demás. Mi prioridad no era Isa, apenas la veía. Ahora abro los ojos, me observo y me veo. Mi prioridad es la Isa renovada, renacida y reciclada, que exhala gratitud por todos los poros de su piel.
¿Te gusta viajar? Yo antes no lo hacía, pero ahora he salido de mi zona de confort y disfruto como aquella niña risueña que fui descubriendo nuevos lugares. Es algo nuevo para mí; dedicar más tiempo a mí misma y a lo que me llena, que a los demás. Ya no corro sin parar en ese reloj de arena que no deja de funcionar, sino que me siento a descansar y a disfrutar de la tranquilidad de cada instante y cada destino.
Esta nueva época ha sido una aprendizaje constante. La amistad, que tan importante es para mí, ha cambiado de nombre. Personas que eran mis amigas, han dejado de serlo y personas que eran desconocidas, ya no lo son, y están a mi lado. Creo que las personas entran en tu vida por una razón, por una estación o por una vida entera.
Así es como ha llegado el reset emocional a mi vida y como sigo enamorándome de las personas aunque que me juzguen.
La fotografía también me acompaña en esta nueva etapa, la enfermedad me acercó más a ella y se ha convertido en mi refugio y mi felicidad. Le dedico más atención y gracias a ella encuentro la calma que me pide el cuerpo. La época de la niña de 7 años que disparaba a todo lo que se movía terminó; la réflex me ha brindado un mundo lleno de posibilidades creativas.
Siempre que puedo me escapo con mi equipo para buscar algo fuera de mi entorno. Cada encuadre, cada captura y cada edición es una forma de comunicación conmigo misma y con el mundo, ese mundo donde estás tú.
Gracias por permanecer ahí!!
Me encantan las fotos! Me parecen impresionantes! Eres toda una artista. 😍
Muchísimas gracias, me alegra un montón que te gusten. Un abrazote
Me encantan las fotos y las flores sobretodo, mi Instagram también va de flores pero el tuyo se nota la profesionalidad y menuda cámara yo con mi móvil, enhorabuena Isa!!!.
Muchas gracias, la cámara no hace al fotógrado pero sí ayuda, gracias por tu compra.Un saludo!!! 😊
Me encantan tus fotos y como te planteas tu vida me gusta verte feliz isa te lo mereces!!!ya sabes lo mucho que te quiero a ti y a tu familia 🥰
Hola, Vir. Sabes que el sentimiento es mutuo. Gracias por estar a mi lado.
La fotografía me abre un camino de creatividad y esta me aporta felicidad, aunque la amistad y las personas como tú también sois imprescindibles para tener una vida bonita.
Te mando un abrazo fuerte fuerte.
Eres una gran artista, pero lo más importante eres la artista de tu propia vida. No dejes de serlo nunca… Tienes un blog precioso. 💞
Gracias por tus palabras, Carmen.
Me anima mucho que te gusten mis fotografías y mi blog, así que seguiré adelante con él para aportaros no solo con la imagen, sino también con las palabras.
Isa, gracias por conocerte, aunque hemos coincidido muy poco, y por ser como eres, sigue así, no cambies💖💖💖
Hola, Chus.
Es un placer compartir contigo aficiones . La vida está llena de personas que nos cruzamos por el camino y tú eres una de ellas. Gracias por todo! Un beso.
Isa tus fotos son una maravilla! Me vuelve loca tu colorido y las cosas tan originales que creas! Eres una crack !!! Animo con tu lucha y tus sueños!!! Tú nos pintas la vida de colores con tus fotos porque eres color y Alegría!
Oh, qué bonito lo que me dices, Marisol. Mil gracias.
Yo también admiro tu trabajo y tenemos cosas en común respecto a los colores, así que la dos seguiremos pintando la vida con alegría a pesar de las adversidades.
Un besito.
Eres una fenómena, y lo sabes! Fotones que sabes buscar, y otros que sabes ver en su justo momento. Atento seguiré porque cada foto nueva es una delicia para la vista.
Hola, Carlos.
Te agradezco que sigas tan de cerca y con tanta admiración mi trabajo. La verdad es que vuestro apoyo es una gran motivación para mí.
Un saludo.
Yo conocí a aquella Isa que vivía en un reloj de arena y se preocupaba más por los demás que por sí misma…y no sabes cuánto me alegro de que hayas sido capaz de empezar a verte a ti misma, de empezar q quererte y cuidarte por encima de todo y de todos. Me encanta ver cómo disfrutas de la vida, porque te lo mereces más que nadie. Te quiero mucho, ya lo sabes…da igual cuantos años pasen y cuánto nos veamos, eso nunca va a cambiar ☺️
¡Qué grata sorpresa tenerte por aquí, Leti!
A veces la vida nos tiene que zarandear para darnos cuenta de que nos tenemos que cuidar y querernos por encima de todo. Tú me conoces bien y lo que dices tiene mucha importancia para mí.
Eres parte de mi vida y de mi familia; personas como tú se quedan en el corazón para siempre. Y como dices: da igual la cantidad de veces que nos veamos, para mí la calidad vale más.
Te mando un abrazo enorme.
Enhorabuena por tu valor, por tu fuerza de voluntad, por tus ganas vivir… Por todo Isa.
Nos das una lección a todos con esa forma de enfocar la vida, con todo lo que eso conlleva. Tus fotos son tu lenguaje, con el que nos alegras la vida a todos. Son maravillosas. Muchas gracias Isa❤
Gracias por todo lo que me transmites con tus palabras, Cristina.
Desde que nos conocimos en el Taller de macro, en León, siempre he admirado y compartido tu amor incondicional por los animales. Tú y Joaquín sois pura humanidad y un ejemplo a seguir.
Muchas felicidades por el artículo, me ha gustado mucho!!!